Por: DieGO
Synergy Motors
Desde que nació, Javier siempre quiso crear una fuente de energía, ahora el problema medioambiental es claro: el petróleo se va a acabar, se está viviendo un incremento en el precio del combustible. Ya existen carros eléctricos, y ya son más eficientes que los vehículos a gasolina, pero las baterías, aún son demasiado costosas.
En
cuanto al funcionamiento, Javier asegura haber realizado las pruebas necesarias
para determinar la viabilidad, aún contra los pronósticos de expertos.
Lea también la primera parte de La tierra es plana
Sobre ruedas, cosiendo ropa,
frente a las cámaras, trabajando en arcilla o haciendo ecuaciones, Nelson
Javier Roldán trabaja para darle más reconocimientos al país cada día.
El mejor flatlander de Colombia
creó una fundación para fomentar el desarrollo tecnológico.
Synergy Motors
Desde que nació, Javier siempre quiso crear una fuente de energía, ahora el problema medioambiental es claro: el petróleo se va a acabar, se está viviendo un incremento en el precio del combustible. Ya existen carros eléctricos, y ya son más eficientes que los vehículos a gasolina, pero las baterías, aún son demasiado costosas.
“Me he dado cuenta de que todos
estos años lo que hemos hecho es pelear contra el viento, dos cuerpos no pueden
estar en el mismo punto al mismo tiempo, tenemos una atmósfera, tenemos un
auto, y cuando este avanza tiene que abrirse paso por el aire, a pesar de la
aerodinámica, el carro tiene que consumir una gran energía para moverse entre
el viento”.
Y fue una noción del deporte, en
este caso del karate, la que llevó a Roldán a pensar su idea: “cuando el
oponente viene hacia mí, yo no voy hacia él para chocar, espero a que él venga
y lo derribo con su propia fuerza, aprovecho esa energía para mí”.
“Entonces, en vez de pelear con
el viento, diseñé un sistema de generación eólica que va integrado al carro, de
modo que cuando anda, ese viento, el que usted siente cuando saca la mano por
la ventana, genere corriente y nuevamente cargue baterías”.
Por supuesto, hay problemas por
resolver: el imaginario de la gente de un feo carro con un ventilador en el
techo que nadie compraría, el precepto de que en Colombia no pueden surgir
innovaciones tecnológicas; que el sistema frene el carro o que la energía sea
insuficiente en determinados escenarios. Para todos, parece haber respuesta.
El sistema sería interno,
recibiría el aire por la parte frontal, y lo expulsaría por las puertas, en
cuanto al diseño, de un carro cuadrado ya se ha rediseñado y se ha proyectado
con formas deportivas.
Realiza, la fundación
Al mismo tiempo que practicaba su
deporte, Javier terminó sus estudios, se graduó como ingeniero de la
Universidad Distrital, creó su propia empresa de marcos, para aportarle a la
industria del flatland, la dejó, aprendió a coser, se ganó la vida cosiendo, se
independizó, planeó su proyecto, lo está desarrollando, participó en un reality
show de la televisión nacional, tuvo una hija, Isis Valeria, y creó su
fundación.
Realiza nace como consecuencia de
la falta de apoyo al desarrollo, y a las trabas de las empresas para dar un
patrocinio, y surge en una Colombia llena de fundaciones para niños, tratamiento
de enfermedades, personas de la tercera edad, pero ninguna para el fomento del
desarrollo tecnológico.
“Las cosas pasan por algo, en
todo caso yo quería dejar lo de los marcos, en mi proyecto estaba no quedarme
haciendo marquitos, yo quería algo mucho más grande en mi vida y desde la
universidad siempre tuve la inquietud de hacer algo raro en mi vida, dejar
huella en algo, mi nombre escrito en la historia, siempre pensaba que iba a
crear el invento del siglo y me la pasaba haciendo inventos locos, hasta que aterricé algo y me la pasé
golpeando puertas a todo mundo, en Colciencias, en el Sena, Destapa Futuro de
Bavaria, EPM, innova, fuera del país, todo el mundo me decía que tenía un
proyecto muy bacano pero que nadie podía apoyarme”.
“Fue por eso que tuve que crear
la fundación, porque todos preguntan, ¿el apoyo a cambio de qué? y con una
fundación, si a uno le hacen una donación, uno puede expedir un certificado
para que le descuenten en impuestos lo que haya donado, así trabajan las
fundaciones, entonces con eso hay una garantía para la gente.
Y como lo que voy a hacer es un
carro, también voy a vender el espacio publicitario para que pauten ahí, y ud.
sabe cómo es la vuelta con los medios, y un carro así va a llamar la atención,
voy a hacer una gira por toda Colombia y convocar medios para presentar el
carro, hacer harto ruido, que se den cuenta de que es hecho en Colombia, para
demostrar que no solo en Estados Unidos o Europa se puede hacer esto”.
Para informar sobre la fundación,
Javier dispuso el correo flatroldan@yahoo.com.
Mientras tanto, Roldán seguirá montando en su bicicleta, rodando y haciendo
figuras por el mundo, exhibiendo el talento que hay en Colombia y demostrando
que la tierra es plana.
Lea también la primera parte de La tierra es plana
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